Izal: una despedida por todo lo alto – Bilbao Arena | Bilbao
Izal se despidió el pasado viernes de Bilbao en un concierto que fue de menos a más y que dejó claro cuáles son los éxitos del grupo
En 2021, Izal presentaba su último trabajo «Hogar» y casi cuando presentaban la gira de presentación, anunciaban que lo dejaban. Así, en frío. Aunque si es cierto que algunos rumores se oían desde justo antes de la pandemia. 12 años de carrera que les han llevado a una gran gira que deja de manifiesto a dónde ha llegado Mikel Izal y los suyos. El pasado viernes llegó el turno de la despedida de Bilbao, y con un pabellón casi al completo, dieron un show correcto y que sació las ganas de los más fans.
Un inicio seguro
Eran las 21:15 cuando se apagaban las luces y en las pantallas aparecían los 5 Izales, abrazándose y dándose esa energía pre-show que, tras una pequeña locución de Mikel, sonó «El Pozo» de su disco «Autoterapia» y que acabó con el público coreando. Tanto en pista como en las gradas, el ambiente fue espectacular y quedó de manifiesto con «Asuntos Delicados» y su «arrímate». Tras ello llegó el dúo «Prólogo» + «Copacabana» que jugó con las pantallas que había en escena.
Tras esto, el setlist jugaba con los cortes del último disco «Hogar» y de aquellos que han llevado el grupo a donde está actualmente. En las más nuevas, Mikel abandonaba la guitarra para dedicarse sólo a la voz y a coquetear con el resto de la banda y las primeras filas. Salvo en «Meiuquer», donde Mikel se acompañó de un ukelele y un discurso para los vivos (por aquello del requiem al revés).
Mismos discursos
Prácticamente en cada canción Mikel introducía el corte con alguna referencia, aunque para «Pequeña Gran Revolución» le dejó el turno a Alberto (guitarra) que la presentó (con referencia a hijos) y que destacó a la guitarra. La nueva «He Vuelto» sonó más electrónica y Mikel pudo lucirse más a la voz. «Los Seres Que Me Llenan» tuvo mención para los acompañantes y tras esto «Palos De Ciego» fue de lo más acústico de la noche.
«El Hombre Del Futuro», del último disco, fue de las que más respuesta del público tuvo, y quedaba claro que este último disco no ha conseguido llegar tanto como los anteriores. Poco tiempo han tenido las canciones para llegar a mover a los fans. Cosa que no pasó con «Agujeros De Gusano» que arrancó con la voz de la hija del productor del disco homónimo y que grabaron en Aranda de Duero allá por 2013. Y sin descanso, sonó «Tu Continente», donde destacó el juego de luces.
A por todas
«Inercia» tuvo la referencia más clara a la despedida antes del «carpe diem» que fue «Pánico Práctico». Aquí Mikel tuvo ocasión de marcarse unos buenos bailes y sacar toda la artillería del escenario (con vapores al frente). En «Autoterapia» destacaron el bajo de Emanuel Pérez y el ojo en pantallas (haciendo referencia a la portada del disco de mismo nombre). La cosa se empezó a animar sin duda en «La Increíble Historia…» donde abrieron con imágenes de tormentas y la voz de Mikel fue increscendo para hacer disfrutar por completo al público.
Antes de «Magia Y Efectos Especiales» Mikel volvió a recordar aquel concierto del Cotton Club y ya con la acústica consiguió que el «todos menos tú» sonara aterrador (los pelos de punta). Hubo tiempo para reconocer a los técnicos y como ley de Murphy, Mikel tuvo algún problema con la guitarra, que solventaron casi de inmediato. En realidad a Mikel le sobraba todo.
Inicio del final
«Despedida» fue la que abrió la verdades despedida y en pantallas pudimos ver una cuenta desde los inicios de Izal hasta hoy con imágenes de la banda. Recordaron los malos años vividos antes de «El Baile», uno de los temas más animados del grupo, antes de lo mejor de la noche. La lenta y acústica «Pausa» pasó a otra esfera, dándole al tema una vuelta mucho más electrónica y que sorprendió como no lo había hecho nada antes.
Tras un breve descanso, «Hogar» arrancó con los acordes de Alberto y la voz de Mikel. Posiblemente sea el corte más especial del último disco y su puesto en el setlist también lo corrobora. La otra gran sorpresa de la noche llegó con «Qué Bien» con la banda cantando entre el público bajo los focos y las serpentinas que llenaron el cielo del pabellón y que daba cuenta de que esto se estaba acabando.
Antes llegó el hit de Izal: «La Mujer De Verde». Dedicada a los sanitarios y bajo una gran ovación, los sonidos más graves, le dieron un inicio diferente al corte, que acabó con el pabellón al completo coreando aquello de «La mujer de verde / Se ha vuelto a poner el traje / Para rescatarme». Dos horas de show que pasaron rápido y que, sin grandes sorpresas, sirvieron de despedida de una de las bandas más influyentes del indie nacional. ¿Volveremos a ver a Mikel Izal por Bilbao pronto?
Texto: David Pereda
Fotos: Dave Blanco