Love Of Lesbian – Espejos donde mirar ciertos espejismos | Teatro Campos Elíseos
«Espejos Y Espejismos»
El pasado jueves, Love Of Lesbian volvió a demostrar de lo que es capaz. Pero no, si pretendes leer títulos como «Belice», «Club de Fans de John Boy» o «Allí Donde Solíamos Gritar» en estas líneas, mejor que vayas saliendo. Porque lo que hicieron los 6 lesbianos junto al equipo que ha preparado esta gira es algo distinto. Casi como un espejismo de lo que pueden ser ellos mismos en cualquier concierto en sala o festival.
Y es que de eso se trataba, o por lo menos esperábamos, cuando se anunciaba un concierto especial en un escenario tan diferente como el Teatro Campos Elíseos. Con buena entrada, aunque sin el lleno total, y con bastantes rostros conocidos del mundo musical (ya los citará mi querido «compañero» de «profesión» desde su trono al que todos le hacen reverencia), sobre las 20:40 unos largos acordes acompañados de la voz en off de Santi Balmes dieron inicio a «Espejos y Espejismos».
No era para «pagafantas»
Una similitud de la brevedad de una cerilla con lo que íbamos a disfrutar dio paso a «Nada» del álbum «La Noche Eterna. Los Días No Vividos» (2012). Arrancó con el teclado y la voz de Santi para después incorporarse el resto de la banda. Las cuerdas, en segundo plano, daban el total protagonismo al líder, que hacía de maestro de ceremonias. Después, sonó «Cuestiones De Familia» de «1999» (2009). Con una actitud poco ausente, y con mucho todavía para volver a agosto, turno para «Contraespionaje» de «El Poeta Halley» (2016).
Entonces llegó el turno de la presentación. Anunciaron que no oiríamos ninguno de los clásicos, que para eso ya están los festivales y el público ebrio. ¡Lastima para los «pagafantas»! Se trataba de algo diferente, de rebuscar entre las cajas de Love Of Lesbian otros temas, esos que tanto cuesta sacar. Y para ellos montaron «Espejos Y Espejismos», para demostrar a través de la poesía y la música, la otra cara de los catalanes.
De su último trabajo de estudio sonó «En Busca Del Mago», que contó con la teatralización de su letra. De nuevo ritmos y acordes lentos nos llevaron a «2009. Voy A Romper Las Ventanas» que acompañaron los susurros de Santi. En escena se seguían produciendo los juegos de cajas que iban, venían, se abrían y se iluminaban.
La cuarta pared
Para la siguiente, Santi y Julían (con acústica) se quedaron solos en escena, al borde del público y sobre (cómo no) dos cajas. Ese fue el momento de romper la cuarta pared, esa que lleva a la comunión artista-público y que tan bien saben derribar Santi y Julián. A través de una larga historia de amores y desamores, nos llevaron de viaje por estrofas de «La Niña Imantada», «Si Salimos De Esta» y «Mi Primera Combustión». Hay que reconocer que en esto de contar historias son de lo mejor de este país (o del suyo o de ese).
Con «Carta A Todas Tus Catástrofes» se remontaron a 2005 y su primer LP en castellano «Maniobras De Escapismo». Un zeppelin hinchable recorrió el teatro mientras los lesbianos analizaban el núcleo del error (¿sería haber empezado en inglés?). Volvieron a la actualidad con «Océanos De Sed». Esta fue la entrada a 4 cortes que, por fin, animaron al público (sobre todo a ese del primer piso). Primero, la envolvente «Wio, Antenas y Pijamas», que dio paso a la imaginaria «Los Días No Vividos». Porque, ¿quién no ha vivido esos días imaginados?
De teatro
La intimista y creciente «La Noche Eterna» estuvo llena de juegos a contraluz, llevando la música a otra esfera y haciendo de la noche de jueves algo irrepetible. La invasión de la noche nos llevó a «Planeador», con Santi y Guillem Albá (uno de los artífices del espectáculo) a los mandos de su particular nave de cartón. Las sorpresas seguían con «La Parábola Del Tonto», que nos habló de cambios, mudanzas y bolsas llenas de ansiedad que Santi rompió en el escenario. «Los Males Pasajeros» se abrió con una voz en off y Santi a la acústica.
«Domingo Astromántico» fue de las más coreadas, antes del parón con Santi, Julián y el «payaso profesional» Guillem Albá al acordeón. Sin ningún tipo de equipo de sonido y haciéndose valer de la acústica del Campos, hicieron magia con «Segundo Asalto». La cosa se terminaba y volvieron a sus inicios con «Un Día En El Parque», tema escrito para esa hija que consiguió hacer llorar a un padre con su particular terrorismo emocional.
La despedida
Habían pasado más de dos horas y casi nadie parecía haberse dado cuenta, pero «Espejos y Espejismos» iba a llegar a su fin. Primero con «El Poeta Halley» y Santi narrando el texto que Serrat dedicó a la palabras. Y para terminar «Oniria E Insomnia», con muñecos sobre cuerdas haciendo equilibrios.
Casi dos horas y media de un espectáculo diferente, hecho con cariño, con los temas «menos» conocidos (o comerciales) de Love Of Lesbian, pero que dejaron claro que también se pueden hacer cosas distintas y enamorar, más si cabe, a su público. !Enhorabuena por «Espejos Y Espejismos»!
Texto: David Pereda
Fotos: Dave Blanco